DIVINA EXPERIENCIA

Londres me fascina. La mezcla de gentes de todos los colores, sabores y devociones hacen de ella un cocktail explosivo. Esta mañana, caminando por Portobello, me cruce a una anciana que apenas se podia mover, una pierna pedia permiso a la otra. Llevaba un chaqueton de piel de conejo y justo en la parte de delante, encima de los botones, llevaba el numero 2.012 de participacion en los juegos Olimpicos de Londres, con una gran Union Jack de fondo, la bandera inglesa. Increible pero cierto. ..
Si fuese el dia de los santos inocentes y lo llevase en la espalda, creeria que era una broma pesada y que la pobre no se habia percatado.. pero no justo cuando la llevaba como su ultimo accesorio, encima del cierre de su abrigo.

Esto me trae a la memoria a otra, menos anciana y de origen portugues, a la que me encontre por primera vez en una manifestacion en la puerta de la Embajada de España, guardando un minuto de silencio por las victimas del 11M. Entre los cientos de personas que alli nos congregabamos ella destacaba entre la multitud, ya que llevaba en brazos una gran virgen, de tamaño natural, a la cual alzaba en sus intentos por chupar camara, y es que las hay que no saben que hacer para llamar la atencion..

Las mañanas de camino al trabajo, suelen ser una lucha continua por conseguir entrar en los autobuses y aun mas incluso, una vez dentro, por conseguir un buen asiento.
En un par de ocasiones me las tope, en hora punta, intentando colarse en el autobus delante de mi. Como una es creyente, aunque no practicante y con buena educacion, las deje pasar delante mio sin rechistar. El conductor, al ver la figura de un tamaño considerable y me imagino que de igual peso, ni siquiera se inmuto y mucho menos el resto de los pasajeros.
Parecia ser solo yo, la que incredula las miraba, mientras la portuguesa se apresuraba a coger dos asientos en hora punta (mas o menos como sucede al inicio de las rebajas cuando las tiendas abren), uno para ella justo al lado de la ventanilla y otro para la virgen… que iba tan pichi de copiloto y encima sin pagar por el ticket, todo un lujo en esta ciudad!.

Yo pensaba que esta mujer trabajaba para alguna iglesia y por consiguiente, llevaba la figura a su destino, pero poco despues me di cuenta de que no. Ella llevaba la virgen en sus brazos a todas partes y en todos sus viajes, como si de una promesa se tratase. Como era dificil que pasase desapercibida, cual no seria mi sorpresa al encontrarmela en otra ocasion en mi barrio y darme cuenta de que ella, la virgen y yo eramos vecinas. Estabamos en el supermercado las tres, y la virgen destacaba dentro del carrito de la compra, entre los diversos productos de la limpieza.

Las pasadas Navidades me partio el corazon encontrarmelas de nuevo en la ruta del autobus 52, de camino a Portobello. Justo antes de bajarse en la parada, la ayude a ponerse la mochila, ya que la veia haciendo mil malabarismos para no perder a su compañera de aventuras para siempre en uno de los frenazos...y que esta se fuera al traste en pedazos...
Me dio una pena enorme el comprobar que ya era tarde… a la virgen le habian amputado una de las manos y le faltaba parte de cabeza…

Y es que el viajar en transporte publico en Londres es una autentica odisea (incluso para los mas santos y las mas virgenes), con la cantidad de conductores suicidas que guian los autobuses…. Tendremos que hacer como la Formula 1 y llevar, a todos los sitios, el casco!

19 Septiembre 2007

Esta manana, en el autobus 52 de camino a Hyde Park, se me aparecio ella, despues de tantos meses sin coger el transporte publico.. era la mujer compuesta y sin su virgen.

Yo ocupe su asiento, el de al lado y me pregunte que habria sido de ella.. La mujer llevaba un carrito de la compra, estaria la figura dentro en pedazos y lo utilizaria para llevar los restos de su figura mas seguros?
Me senti triste, no era la misma sin su otra mitad..se la veia baja de moral. Llevaba dos rosarios colgando del carrito, ultimo signo evidente de su devocion hacia Maria Santisima. Que Dios la bendiga a ella por su fidelidad y teson hacia su companera del alma.